El Ayuntamiento de Villalonga trabaja para restaurar la ermita de San Antonio Abad y Santa Bárbara, uno de los espacios más queridos y apreciados por la localidad y referencia en fiestas y fechas señaladas de la población.
El templo data del siglo XVIII y su estado actual requiere una intervención inmediata. La actuación irá acompañada de una actuación clave que permitirá conservar la campana gótica de la ermita.
El alcalde de Villalonga, Román Garrigós, ha indicado que esta actuación contempla dos fases: «Por un lado la obra de restauración, necesaria, para evitar daños mayores; por otro la restauración de la campana y la creación de una réplica que ocupe su lugar para impedir cualquier tipo de robo, ahora que se ha conocido su valor histórico y patrimonial».
La inversión será de 21.000 euros y ya está redactado el plan de actuación, se está esperando la autorización de la Dirección General de Patrimonio de la Generalitat.
En la actuación del porche, también se mejorará el techo y se tratarán y renovarán algunas vigas de madera que requieren una restauración. Garrigós ha asegurado que «el gobierno de Villalonga quiere conservar todo el patrimonio, desde la ermita a los azudes del Serpis; todo es historia y todo hay que protegerlo para consolidarnos en la referencia de turismo de montaña y de interior que estamos consiguiendo tras muchos años de trabajo».
El municipio ya ha destinado casi 5.000 euros para la restauración de la campana, que viajará a un taller artesanal especializado para «recuperar toda su belleza». De forma paralela, el Ayuntamiento ha encargado una réplica para colocarla en la ermita una vez que acabe la restauración. Esta otra campana costará 3.000 euros.