Agotado, acabado, consumido y exhausto son algunas de las palabras con las que se podría definir el estado actual del equipo de gobierno que mal dirige Diana Morant y que tiene consecuencias en la vida de los vecinos.
Y muestra de ello ha sido la presencia de Gandia en FITUR en la que únicamente se han presentado dos proyectos. ¡Y qué dos proyectos!
El primero de ellos es la construcción de un glamping cerca de l’Alqueria del Duc para 3.000 personas, un proyecto que ha nacido ya en vía muerta tras la pública oposición de su socio de gobierno, que a la vez tiene las competencias en medio ambiente y urbanismo. Es lo que tiene ir a Madrid sin consensuar los proyectos con tu socio prioritario, que te dejan con las vergüenzas al aire.
El segundo anuncio que realizó Diana Morant fue su intención de situar a Gandia como la Capital del Teletrabajo. En resumen: humo. Típico anuncio al que nos tiene acostumbrados para conseguir un titular de doble página en prensa, un post en Facebook y 3-4 fotos sonriente, pero detrás de todo esto está la nada más absoluta.
Un proyecto, presentado a bombo y platillo en una azotea de Madrid, que por muy loable que sea cuando en casa tenemos cerca de 8.000 parados pasa a ser ridículo, pero sobre todo ofensivo hacia las personas que en estos momentos no tienen trabajo.
Los gandienses merecen un equipo de gobierno que presente proyectos que sean revulsivos para la generación de empleos que nos permitan seguir viviendo aquí y no nos tengamos que marchar a otras ciudad para poder ganarnos la vida. Proyectos ambiciosos que situen a Gandia como un referencia en toda España y no como una ciudad que en 2019 tenía como proyecto estrella “una reserva de mariposas” y en 2021 la Capital del Teletrabajo.
Presentar esta medida en las actuales circunstancias significa que Diana Morat ha perdido el respeto por los problemas de la gente. Sabíamos que los gandienses eran la última de sus preocupaciones, ahora definitivamente lo ha demostrado.
Gandia como Capital del Teletrabajo es a Dianan Morant lo mismo que la España 2050 para Pedro Sánchez. Castillos en el aire, alejamiento de los problemas reales de la gente y fuegos de artificio para esconder la ineptitud de liderar el futuro.
Lamentablemente esa es la Gandia que sufrimos, la Gandia que no nos gusta y la Gandia
que debemos cambiar.
Frente a este proyecto político agotado, solo cabe la construcción de una alternativa sólida, ilusionante y de nuevas propuestas en torno al Partido Popular de Gandia. Esta alternativa política debe ser capaz de superar las siglas partidistas y agrupar a todos aquellos votantes de centro-derecha para que ningún voto se quede sin representación y también a los votantes del PSOE descontentos con Pedro Sánchez y Diana Morant, diferentes caras de la misma moneda.
En nuestras manos está ser la columna vertebral de la ciudadanía capaz de mantener unidos a los vecinos a pesar de las diferencias, que acabe con las diferencias entre barrios, que dé oportunidades para todos, especialmente los jóvenes, y que tenga ambición por Gandia. Sufrimos ya 6 años de letargo, 6 años con una Gandia adormecida. Desde la unidad interna recuperemos la ilusión para dar la batalla por la ciudad que tanto nos apasiona. Con ese objetivo diario, seguimos.
Pablo Almiñana Piera
PP Gandia