El mes de septiembre no solo marca el regreso a las aulas para los estudiantes, sino también el inicio de un nuevo ciclo para las administraciones locales. En Gandia, el alcalde José Manuel Prieto ha presentado el plan de acción para el curso político 2024-2025, con un programa de inversiones destinado a impulsar la «tercera gran transformación» de la ciudad.
Este periodo se caracterizará por la finalización de proyectos clave que redefinirán el paisaje urbano de Gandia. Entre ellos destacan la rehabilitación del histórico Mercado del Prado, la renovación del entorno del ayuntamiento, y la mejora de infraestructuras como el depósito del Clot de la Mota y el sistema de aguas potables de Beniopa. Además, se espera que terminen las mejoras en el Centro Social Marcelino Pérez y la restauración del campanario de la Colegiata.
Con una estrategia basada en cuatro ejes fundamentales —inversiones, convivencia, derechos de los ciudadanos y emergencia climática—, el ayuntamiento se ha comprometido a mejorar las infraestructuras y conexiones de la ciudad, comenzando con la urbanización del polígono Sanxo Llop el próximo 23 de septiembre, un proyecto que implica una inversión de 17,15 millones de euros. El comercio local también recibirá un impulso con la próxima implementación del programa «Alcem Persianes«, mientras que el sector turístico se verá beneficiado con el inicio de las obras del Hotel Boutique La Ducal, este mismo 2 de septiembre.
La convivencia será otro pilar esencial, con la propuesta de un Pacto por el Civismo para combatir comportamientos incívicos y reforzar la imagen de la ciudad. En cuanto a los derechos de los ciudadanos, el acceso a la vivienda será una prioridad, con la introducción de un seguro de caución que facilitará la salida al mercado de alquiler de viviendas vacías. Las calles Ferroviaris, Safor y Benicanena también serán objeto de mejoras urbanas, con una inversión de 8,8 millones de euros.
Finalmente, el alcalde Prieto ha subrayado la importancia de abordar la emergencia climática, adaptando la ciudad a las nuevas realidades provocadas por el cambio climático, como los veranos más extremos. Gandia, que ya cuenta con un alto índice de aprovechamiento del agua, continuará trabajando para ser un modelo de sostenibilidad urbana en los próximos años.