El paso de la borrasca Gloria por nuestra ciudad ha dejado una huella difícil de borrar. Hoy, una veintena de días después del final de este episodio de viento huracanado, lluvia intensa y temporal de levante –con olas de más seis metros–, aún quedan zonas por recuperar.

Gloria ha demostrado que Gandia está preparada para la gestión de emergencias. Y ello se debe, en gran parte, a la profesionalidad y el celo de los trabajadores municipales, cada uno desde su respectivo puesto y todos ellos igual de importantes. Lo demostraron en agosto de 2018 con el incendio forestal de Llutxent y lo han vuelto a hacer el pasado mes de enero con esta destructiva borrasca.

¿Significa que ya está todo hecho? En absoluto. Durante el temporal se actuó en aquellas situaciones que pudieran generar peligro para la ciudadanía, pues en estas emergencias todos tenemos claras las prioridades. Y, la primera de ellas, es la integridad de las personas.

Superado el trago inicial, dio comienzo la operación limpieza a tan solo 24 horas del final del episodio de viento, lluvia y fenómenos costeros. El 22 de enero, cuando aún no se había desactivado la emergencia 0 en la desembocadura del Serpis, los equipos de limpieza daban comienzo a la ardua tarea de retirar los montones de arena depositados en el Passeig Marítim que hacían imposible la circulación de vehículos.

La primera fase de la operación concluyó la pasada semana. Libre de arena el vial y el propio paseo, el operativo se trasladaba a la misma arena de la playa norte, comenzando desde el primer sector (Club Náutico), para ir avanzando en dirección a la playa de l’Auir.

El objetivo de esta segunda fase es el desenterramiento de instalaciones que habían quedado literalmente sepultadas por la arena (pasarelas, pies de duchas, servicios públicos, chiringuitos, juegos…) y la nivelación de una playa que había quedado literalmente arrasada por efecto del fuerte oleaje.

Hoy podemos decir, con todas las reservas de estos casos, que la playa norte estará lista para el inicio de la temporada alta, coincidiendo con la semana fallera. Estos trabajos se han realizado íntegramente con recursos municipales, sin ayuda exterior –de otras administraciones– alguna.

Ahora nuestra preocupación es recuperar las playas de Venècia y Rafalcaid.

En el primer caso, la Autoridad Portuaria podría iniciar en breve los trabajos de retirada de cañas y maleza depositada por el temporal. En cuanto a Marenys, está pendiente de la Declaración de Zona Afectada Gravemente por una Emergencia de Protección Civil –antes Zona Catastrófica-. Cuando se produzca tal declaración que compete al Gobierno de la nación, la Demarcación de Costas nos ha asegurado que en un mes estaría en disposición de limpiar toda la playa.

Sé que a los vecinos de Marenys les puede parecer una demora excesiva, pero los medios materiales disponibles por el Ayuntamiento de Gandia son totalmente insuficientes para acometer tal tarea. No hay otro remedio que esperar, muy a nuestro pesar.

Miguel Ángel Picornell

Concejal delegado de Servicios Básicos del Ayuntamiento de Gandia