La desestacionalización del turismo –conseguir que los visitantes lleguen a tu municipio más allá de los meses fuertes del verano- es la gran meta que persiguen los gobiernos locales, especialmente aquellos ubicados en zonas estratégicas como es la costa de la Safor. Xeraco no queda al margen de este objetivo y su alcalde tiene claro que a su “privilegiada y excepcional” playa, a la que se suma un gran entorno natural, le faltan muchos recursos. Y el más claro y ambicioso es un hotel con vistas al mar.
El alcalde, Avelino Mascarell, ya trató de poner en marcha este proyecto cuando ocupó la alcaldía en 2011, pero no consiguió que fructificara. Ahora, la maquinaria parece estar en marcha y, “con todos los informes técnicos favorables y algunas empresas ya interesadas que han venido incluso a visitar la parcela”, el hotel, asegura, será una realidad. Los trámites, de hecho, siguen su curso y el Ayuntamiento trabaja en la modificación de las normas subsidiarias que permitan la licitación y adecuación de la parcela donde está prevista la construcción del hotel.
De las características concretas Mascarell no habla todavía, porque el proyecto se encuentra en una fase muy inicial, pero a grandes rasgos habla de un edificio de unas 7 u 8 alturas que, si bien sobrepasa con creces las tres alturas (más planta baja y sótano) que se han edificado en los últimos años, sí encaja en el modelo urbanístico previo a esa limitación. “Se trata de optimizar recursos para poder dar cabida a todas las necesidades y recursos de los que la playa no dispone, y de modo que resulte atractivo para que las empresas quieran invertir”, explica.
Además de la oferta de camas que supone la apertura del hotel, la intención es ir mucho más allá de una oferta de camas y que el complejo incluya otros muchos servicios que, a su juicio, son necesarios para revitalizar la zona, conseguir la desestacionalización y revitalizar tanto a la población visitante como a la local. Habla de un espacio con cabida para convenciones o congresos, eventos sociales multitudinarios, restaurante y bufet, cafetería-heladería, gimnasio, etcétera.
De este modo, se complementaría la actual oferta turística formada por apartamentos, mayoritariamente de turismo familiar local, y un camping. Tras este último se localiza la parcela en cuestión, en la zona del aparcamiento público gratuito de la Avinguda de la Mota. Superados los estudios técnicos, ahora se trabaja en los trámites administrativos y, resueltos los informes, el plan pasará por el pleno municipal para iniciar el concurso, previsiblemente, en cuestión de meses. “El proyecto es viable, falta que las empresas lo encuentren atractivo. Sabemos que ahora por el Covid no es buen momento, pero el Covid no va a estar para siempre y necesitamos la inversión cuanto antes”.