El Ayuntamiento de Miramar ha abierto los servicios de ‘Tierra’ del Centro Deportivo El Molí, después de renovar las instalaciones y equipaciones durante el verano, aprovechando el cierre por la Covid-19. Más de 300 personas se han interesado esta última semana en recibir información sobre la reapertura del Centro, tanto de las actividades dirigidas al gimnasio como de las clases en la piscina. Un día después del apertura alrededor de 100 personas han renovado la inscripción y se han dado de alta como nuevos usuarios.
“Estamos muy contentos por la acogida que ha tenido la reapertura de las instalaciones municipales, hemos trabajado para renovar el centro y abrir de forma segura en este tiempo de covid-19. Además, en octubre empezarán las inscripciones para la zona de agua y ya hemos tenido centenares de personas interesadas en las clases de natación”, explicaba Salva Gregori, responsable de El Molí. «Queremos que los usuarios, dentro de la nueva normalidad, practiquen el deporte de forma segura en todo momento, tanto en la desinfección de las salas como en la utilización de todos los espacios al aire libre en los que disponemos en Miramar”, concluye Gregori.
La piscina cubierta, también reformada, empezará las actividades a principios de octubre, con natación para todas las edades y clases dirigidas de aquagym.
MEDIDAS DE SEGURIDAD
El Ayuntamiento de Miramar ha elaborado un protocolo de seguridad ante la Covid-19 con la intensificación de la desinfección de las instalaciones. “Hemos puesto especial cura en la señalización de todo el centro, direcciones, aforo por salas y las nuevas normas que aseguran la realización de un deporte seguro”, recalca Gregori. Entre las normas está el uso de la mascarilla siempre que no se esté practicando un deporte, el control de temperatura en la entrada del recinto, el control del aforo en todo el Centro Deportivo, la limpieza y desinfección de la maquinaria de todas las salas, así como la extracción y renovación del aire constantemente.
El Ayuntamiento de Miramar ha invertido casi 8.000 euros, procedentes de fuentes propias municipales, en la puesta en marcha del protocolo de seguridad en el Centro Deportivo. En concreto se ha adquirido una cabina de desinfección de ozono y dos nebulizadoras, aparatos destinados exclusivamente a la limpieza y desinfección de las instalaciones y equipaciones deportivas. Además de toda la señalización, termómetros y dispensadores de hidrogel distribuidos en todas las salas de centro.