UGT PV celebró en la Mancomunitat de la Safor de Gandia una asamblea sobre los cambios de la Reforma Laboral, que congregó a 150 delegados y delegadas hasta completar el aforo de la sala. Participaron el secretario General comarcal de UGT PV Raül Roselló; Silvia Valero, secretaria comarcal de empleo e igualdad; la secretaria de Acción Sindical UGT-PV, Lola Ruiz; y el secretario General UGT-PV Ismael Sáez.

La asamblea, la quinta que se ha llevado a cabo dentro del ciclo que se está haciendo a nivel Comunitat para trasladar los principales aspectos de la reforma laboral, ha servido para trasladar a las delegadas y delegados participantes un análisis sobre los principales puntos de esta reforma, que se han traducido en mejoras concretas frente a la precariedad instaurada y que repercuten de manera directa sobre cientos de miles de trabajadoras y trabajadores.

En ese sentido, en su presentación, el secretario comarcal Raül Roselló indicó que “en el poco tiempo que lleva aprobada, la reforma ha implicado en la comarca un cambio de paradigma como lo muestran las cifras, que reflejan ya cuatro veces más contratos indefinidos en la última actualización, que los recogidos que el mismo periodo del año anterior”. Por eso, ha dicho, “es importante destacar sus efectos positivos”.

En su intervención Lola Ruiz, secretaria de acción sindical de UGT-PV, destacó algunos aspectos de la reforma, profundizando en un modelo en el que el contrato fijo es prioritario, con el fin de reducir la temporalidad en torno a 10 y 12 puntos y acercarnos a Europa; e impulsando la extinción de las empresas multiservicios de nuestro mercado laboral. Además, con el nuevo modelo de formación dual, los contratos de formación han pasado de tres años a dos años. Para finalizar su intervención señaló cuestiones prácticas de aplicación de la norma, abriendo a las mismas un turno de preguntas para las delegadas y delegados participantes en la Asamblea.

El secretario General de UGT-PV se dirigió a la asamblea con una intervención en la que enfatizó el hecho de que con esta reforma se haya conseguido reequilibrar la negociación colectiva, “aun quedando cosas por conseguir”, y destacó el  logro de la prevalencia del convenio del sector (perdida con la anterior reforma). “Este ha sido el primer esfuerzo riguroso en 40 años para reducir la temporalidad en la contratación, endémica en nuestro territorio y de la cual se abusaba, como se nos venía pidiendo desde la UE”. Además, Sáez señaló a su vez la importancia del proceso negociador que se ha llevado a cabo en esta reforma, «en un escenario político complejo, con una oposición muy poco responsable».

Entre los temas de actualidad que repasó el secretario general de UGT PV, uno de los más preocupantes es «la escalada de los precios que desde hace un tiempo sufrimos y que se ha visto agravada por la situación de guerra que se vive en Europa a consecuencia de la invasión de Putin a Ucrania y que trae efectos colaterales, como el incremento del coste de la energía o el paro de los transportistas». Para Sáez, «toca actuar para contener los precios, proteger el empleo y frenar el deterioro de nuestras condiciones de vida». Pero negó que la solución sea la de la bajada de impuestos «como dice la derecha, ya que por una parte nuestro país tiene de una de las tasas impositivas menores de la Unión, quien además marca mínimos para energéticas; y por otra que hay que entender que son estas mismas tasas las que permiten las ayudas al mantenimiento de las empresas y del empleo que se le demandan al gobierno».

“Los ciudadanos tienen que ser conscientes de que estamos en una situación de guerra y frente a la misma hay consecuencias fruto del bloqueo económico a Rusia, las cuales hemos de tratar de minimizar en la medida de lo posible; y para conseguirlo tenemos que estar unidos dentro del ámbito de la UE». Esta situación implica que las energéticas «estén obteniendo beneficios extraordinarios porque el precio de la energía está fijado por el gas, y estos beneficios deben ser reequilibrado en ayudas a las empresas que están teniendo más dificultades, porque en esta crisis hay que repartir las cargas”.