El portavoz de Alcara espera a que la entidad convoque elecciones y elija presidente para empezar a negociar
“En Alcara estamos intentando llegar a un acuerdo con el que salgan beneficiados los socios, nuestra empresa y la sociedad de Gandia, para que el proyecto salga adelante lo antes posible”. Así expresaba Paco Herrero, representante de Alcara Infraestructuras SL en Gandia, las intenciones de la empresa que opta a obtener la concesión del Club Náutico para los próximos 25 años, después de que en mayo el TSJ anulara su exclusión del proceso de selección en diciembre de 2017.
Desde que se puso en marcha el concurso de la nueva concesión, a la que cual optaban los propios socios del club por un lado, y la empresa Alcara por otro, se han sucedido toda una serie de hechos, negociaciones, recursos y sentencias que han dilatado en el tiempo el proyecto final de remodelación de las instalaciones. Ahora, tras publicarse el fallo del tribunal, la mercantil no desea dilatar más en el tiempo la situación y vuelve a intentar negociar con la otra parte con el fin de unificar las propuestas y llegar a un acuerdo que convenga a todos. “Más vale un mal acuerdo y no alargar los plazos de recursos, porque con ello perdemos todos”.
En estos momentos Alcara ha hecho una oferta a los socios que, según Herrero, “ni el propio Náutico como club ha propuesto”. La entidad adquiere el compromiso de garantizar a los actuales socios del RCNG con amarre que, durante el periodo de ejecución de las obras de la Nueva Marina, por un periodo máximo de 2 años, se aplicará solamente una cuota de 0,10€/m2·día en concepto de mantenimiento, y se elimina la cuota de socio de 50€. Eso, a cambio de que acepten el proyecto que en su día presentaron ante la Autoridad Portuaria de Valenciana (APV) para construir la nueva Marina de Gandia, y que volverán a presentar, junto a los avales y la financiación, en cuanto se retome el proceso.
– Tras la sentencia del tribunal, parece que todo vuelve al principio y volverán a presentar su proyecto. ¿Cuál es la gran diferencia entre uno y otro?
– El Náutico va con la idea de hacer un edificio con locales de ocio y en nuestra empresa queremos enfocarlo más al deporte náutico. Pensamos que no tenemos competencia en la comarca, nuestras instalaciones serán espectaculares y muy cómodas. Consideramos que hay que explotar el deporte náutico, que es un diamante en bruto y de él nos podemos beneficiar todos, la hostelería, los hoteles y el comercio. Atraeríamos a un público ideal para la famosa desestacionalización de la que tanto se habla en la playa de Gandia. Nosotros sabemos que es complicado y arriesgado, pero si se puede ofertar algo que no se tiene, debemos potenciarlo.
– ¿Por qué Alcara se quedó fuera?
– En 2017 el Club Náutico presentó 80 recursos a la Autoridad Portuaria para que desestimaran nuestro proyecto y hubo uno al que se agarraron. Alegaron que habíamos presentado fuera de plazo el aval para optar a la ejecución de la obra. Pero no ocurrió así y la justicia nos ha dado la razón, por lo tanto volvemos al momento en el que éramos nosotros los adjudicatarios. Hay que esperar un mes para saber si el Club Náutico recurre pero lo que está claro es que todo esto va a retrasar más el comienzo de la obra y creo que es un error.
– El proceso puede ser interminable y el edificio ya está demolido. ¿Qué les dicen a los socios?
– Nosotros podremos recurrir todo lo que haga el Náutico, porque sólo se puede volver al momento inicial en 2016 en el que se presentan los dos proyectos. Si en cuatro años no se ha hecho nada podemos tener otros cuatro más en los que tampoco se haga nada. ¿Quién nos asegura que volvamos a tener más recursos?. Por lo tanto, creo que las dos partes debemos solucionarlo ya y salir todos beneficiados. No quiero en ningún momento que los socios salgan perjudicados.
– ¿Han empezado las negociaciones?
– No. Necesitamos un interlocutor válido, ya que el que era presidente, Daniel Vidal, dimitió hace poco y asumió el cargo en funciones el vicepresidente, David González. Pero los estatutos marcan que se deben presentar listas y convocar elecciones. Necesitamos hablar con alguien que tenga las facultades para llegar a un acuerdo, que sea la voz de los socios. Si es González, bienvenido sea, y si es otra persona le plantearemos todas nuestras posiciones porque hay mucho para hablar.
– ¿Qué posición está teniendo el Ayuntamiento?
– No interviene, tengo la sensación de que no se ha posicionado porque están muy ocupados con el tema del Covid. Comprendemos que es una prioridad, pero espero que el gobierno tome partida en esto por el bien de la ciudad, independientemente de quién gane.
Paco Herrero ha crecido en las instalaciones del Náutico, de ahí el gran empeño e ilusión que ha puesto en que el proyecto de Alcara salga adelante. Su pasión por todo lo relacionado con el mar se la transmitieron sus dos abuelos, que ya fueron socios del Club. Y después de ellos, sus padres. Él siguió sus pasos y llegó hasta la directiva, con David Martínez, y fue vicepresidente y tesorero durante cuatro años. “He aprendido a nadar en su piscina. Desde los 16 años estuve de entrenador de remo, he participado en diferentes competiciones llevando el nombre del Club por toda España”.
De sus años en la ejecutiva de la entidad recuerda: “Ya entonces estuvimos peleando por un nuevo proyecto a la vista de que era inviable hacerlo desde el Náutico por los costes que debían asumir los socios. Ahí es cuando decidí presentar el proyecto, con capital externo, con unos inversores que creyeron en la Marina de Gandia incorporando a los socios del club. En ningún momento se pensó en excluirlos del proyecto”.
Presentadas formalmente las dos ideas, en marzo de 2017 Alcara ya lanzó una primera oferta al Náutico con la de idea de simplificar el proceso, pero el Club rechazó todos los puntos. Ya entonces se hablaba de “evitar un incierto concurso o inicio de trámites administrativos interminables, por alegaciones de ambas partes”. Más de 3 años después, y con las instalaciones totalmente derruidas, se cumplen las predicciones y el futuro del Náutico de Gandia es más incierto que nunca.
LAS FECHAS
– 12 de mayo de 2016: RCNG presenta su solicitud de concesión
– 18 de julio de 2016: Alcara Infraestructuras SL presenta su solicitud de concesión
– Marzo 2017: Primera oferta de negociación de Alcara al RCNG. Rechazada
– 2 junio de 2017: la APV otorga la concesión administrativa a Alcara. El RCNG recurre
– 15 de diciembre de 2017: La APV declara nula la concesión a Alcara
– 9 de febrero de 2018: Alcara interpone recurso contencioso-administrativo a la APV
– 22 de junio de 2018: La APV otorga la concesión administrativa al RCNG
– Mayo 2020: Comienza el derribo del Náutico.
– 28 de mayo de 2020: El TSJCV acepta el recurso de Alcara de 2018 y anula la concesión del RCNG
Esa sentencia vuelve a 2018. En septiembre se espera la aclaración de la sentencia, solicitada por ambas partes, para saber exactamente hasta dónde se retrotrae la historia. A partir de ahí, se verá.