Pasado el periodo estival comienza el curso político y el gobierno de progreso de Gandia, con el nuevo alcalde José Manuel Prieto al frente, tiene claras cuáles van a ser sus principales metas para afrontar el año 2022. Con el objetivo marcado de consolidar la recuperación económica, social y emocional, y que vuelva a la ciudad una “nueva normalidad” después del tiempo que hemos vivido bajo las restricciones sanitarias por la pandemia, no va a ser tarea fácil. Pero todos los medios al alcance del ejecutivo van a ir encaminados hacia esta nueva etapa.
Así, este otoño está previsto que se remita al Ministerio de Hacienda el presupuesto de municipal 2022 para que se le pueda dar el visto bueno, requisito indispensable para poder aprobar las cuentas del consistorio –como todos recordarán, estamos controlados por un plan de ajuste–. Esto quiere decir que está previsto que durante el mes de noviembre se podrá terminar de concretar dicho presupuesto para su aprobación el pleno de diciembre.
Como los últimos años, lo que marcará este presupuesto serán el orden y rigor económico, aunque la llegada de 90 millones de euros de distintas administraciones, darán paso al inicio y continuación de los diferentes proyectos de la ciudad. Como todos los gandienses han podido comprobar, las obras del nuevo Espacio Sanitario de Roís de Corella van a un ritmo por encima del proyectado inicialmente, lo cual hará que vea la luz antes de lo esperado.
A su vez, y ante el desbloqueo del polígono de Sanxo Llop, se han firmado unos convenios con la Conselleria de Innovación para la implantación del Distrito Digital, lo que permitirá que empresas que innoven en la salud se puedan implantar en dicho sector. Esto supone un impulso de negocio socio-sanitario en el que esperamos apuesten las empresas relacionadas con la salud.
Otra iniciativa del Gobierno de Gandia para el inicio del año será la creación de una brigada de inspección de mantenimiento de la ciudad, consignada en el presupuesto de 2022 y la cual tendrá como prioridad tener una ciudad confortable y de calidad para sus ciudadanos.
Con las ayudas ya concretadas de la Generalitat Valenciana (3,2 millones de euros) y la Diputación de València (1,6 millones de euros) se iniciará la construcción del pabellón polideportivo universitario en la zona del Grau, que a la vez con la colaboración de la Universitat Politècnica de València serán una realidad para unas instalaciones que a su vez serán un espacio para la cantera del deporte gandiense y acontecimientos deportivos de gran calado.
Pero no solo el deporte se va a ver beneficiado de nuevas infraestructuras. Las obras del puente de la avenida d’Alacant verán la luz al final de año o el nuevo Palacio de Justicia, tan demandado durante varias legislaturas, será realidad con este gobierno configurando la zona urbanística de plaza El·líptica-República Argentina con Santa Anna y aportando movimiento económico a dichos barrios.
Tampoco podemos olvidar la remodelación y ampliación del instituto Ausiàs March, que el Gobierno local, tras un pequeño escollo, volverá a adjudicar sus obras próximamente. O el Pla Edificant, que está siendo una gran iniciativa en la renovación de todos los centros educativos de la ciudad.
Los fondos europeos también supondrán una inversión pública sin precedentes en nuestra ciudad, con una línea de proyectos transversales y multisectoriales en los que se están trabajando para poder optar a la mayor línea de subvenciones.
El gobierno de progreso gandiense seguirá actuando con los valores que le caracterizan –rigor y orden–, lo que no quiere decir que la ciudad no evolucione, si no que se dé continuidad al proyecto de ciudad marcado en sus programas.
Todos sabemos que la pandemia ha marcado un antes y un después en nuestra vidas y debemos continuar con ella con la máxima seguridad, pero a la vez no deteniéndonos en el camino.
Por último, un apunte a la oposición. Mejor le iría a la ciudad con una oposición constructiva. Dejen de denunciar nimiedades –que se solucionan con una simple conversación con el concejal o concejala encargado/a del área– y no creen discordias sectarias e ideológicas que solo buscan el barullo o el enfrentamiento. Y, para muestra positiva, ahí tienen al señor Renolt.