El concejal de Economía y Hacienda, Salvador Gregori, ha dado cuenta esta mañana de la viabilidad económica del Ayuntamiento de Gandia registrada por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) desde 2020 hasta la actualidad y basada en los cuatro indicadores matriz: situación de riesgo de sostenibilidad, el Periodo Medio de Pagos (PMP), la morosidad y la estabilidad presupuestaria. La salud económica municipal continúa en riesgo alto, aunque este estado se desprende, recordaba Gregori, «de una exposición anterior muy alta, cosa por la cual se tiene que continuar perseverando en la subsanación de las cuentas municipales», tal como se ha demostrado esta semana con la aprobación de la amortización de la deuda pública que se ha luchado en el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Las cifras muestran que el PMP de 2020 se sitúa en 13 días, una muestra positiva que sitúa el Consistorio gandiense “muy por debajo del límite legal”. Sobre el que llevamos de 2021, este indicador también muestra cifras favorables, puesto que la media se sitúa en el 15,92 respecto al primer trimestre, y en el 10,62 respecto al segundo (13,27 de media), “uno de los PMP más bajos en la historia financiera de esta ciudad” y de este Ayuntamiento que permite estimular la dinámica de las cuentas de las empresas de nuestra ciudad de manera ininterrumpida para su correcto funcionamiento.
En cuanto al periodo de morosidad, Gregori también ha mostrado su satisfacción puesto que este indicador sitúa al Consistorio en una media positiva de 28 días de retraso, que se explica por el proceso natural que sigue la gestión de las facturas, que no se pueden pagar de manera inmediata porque necesita un proceso lógico de verificación y tramitación técnica hasta que llega al responsable político.
Este indicador empieza a contar desde el primer día que el Ayuntamiento recibe la factura, y no desde la firma del responsable político como determina el PMP. Por lo tanto, se trata de un valor limpio que muestra el periodo transcurrido entre el registro de la factura hasta su correspondiente pago, y que motiva el PMP como indicador a tener en cuenta para el Ministerio. Sobre esta ecuación de valores, el edil ha aclarado que «si bien se podría extraer una hipótesis de irregularidad motivada por la retención de las facturas, se puede observar que no es posible porque se reducirían las cifras del PMP y se dispararían las de morosidad, cosa que no corresponde a las cifras facilitadas por la AIReF».
El último indicador, el de estabilidad presupuestaria, hace referencia a la diferencia entre ingresos y gastos del Capítulo 1 al 7, esto es, determina una ejecución adecuada del presupuesto que, excepto sorpresas, no presentará problemas hasta fin de año. En esta línea, Gregori ha especificado que las reglas fiscales de este indicador se suspendieron desde el año 2020, un camino a seguir posiblemente para el 2022 según las previsiones del Ministerio.
Con estos datos favorables, Salvador Gregori ha destacado que “estamos cumpliendo y teniendo estabilidad presupuestaria”, un diagnóstico económico que “se está ejecutando de manera correcta, que creará un superávit presupuestario para el próximo año y que posibilitará invertir parte del remanente en las modificaciones de las partidas económicas que muchas veces no pueden contemplarse en el presupuesto por las restricciones que impone el Ministerio. Con estos números, el Ayuntamiento de Gandia continúa en una buena senda económica a pesar de la pandemia que da orden a las finanzas municipales y viabilidad a todas las empresas de nuestra ciudad”, ha recalcado.