Nadie se esperaba que nueve meses después de iniciarse la presente legislatura en Gandia –la legislatura empezó el 15 de junio de 2019 y el primer estado de alarma se hizo efectivo el 15 de marzo de 2020–, de repente nos sorprendería a todos una pandemia mundial. Nadie podía imaginar que, en esta legislatura tan esperanzadora, íbamos a enfrentarnos a un reto global que tendría tantas afecciones y consecuencias, más aún viniendo de cuatro años de gestión en los que hicimos frente a la quiebra económica que dejó el Partido Popular.

Indudablemente, el principal reto de la legislatura ha sido –y continúa siendo– combatir el coronavirus. En este sentido, la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, y su equipo siempre hemos tenido claro que durante el último año la prioridad tenía que ser la sanidad para salvar la vida de las personas y la activación de todos los mecanismos y ayudas que fuesen necesarias.

Así, el Ayuntamiento de Gandia, la Generalitat Valenciana y la Diputación, en un momento de tanta incertidumbre, han movilizado ya 15 millones de euros, implementando a través de las arcas municipales todas las líneas a las que no han llegado otras Administraciones –con ayudas al comercio, la hostelería, el turismo, la cultura o el ocio nocturno; el bienestar social; el alquiler de viviendas; el impulso de los parkings municipales; los ‘Xecs Consum’; las tres ayudas Paréntesis del plan Resistir que continúa en marcha; la innovación y la digitalización, entre otras–.

Se han puesto todos los esfuerzos en lo urgente. En primer lugar, en las familias que más están sufriendo unas consecuencias irreparables, cuya cobertura social está suponiendo un enorme esfuerzo por parte del ayuntamiento. Sin olvidar a los sectores productivos que, ahora más que nunca, los necesitamos fortalecidos para lograr ese nuevo espacio de oportunidades que se abre con el ecuador de esta legislatura.

Además, están todos y cada uno de los proyectos activados en nuestra ciudad que no ha parado en ningún momento y sigue en marcha en su progreso. Hay garantizada una hoja de ruta llena de certezas que va a necesitar de todas las alianzas y todas las manos posibles con la meta de la reactivación económica y social de Gandia.

De este modo, en poco tiempo han sido realidad el Parque Arqueológico del Castell de Bairén, la mejora de instalaciones deportivas, el bulevar de la playa, la renovación del paseo marítimo y de diversas calles del núcleo antiguo de la playa, el hotel cuatro estrellas superior de la cadena Senator, etc. y lo serán el nuevo Espai Sanitari Roís de Corella, el Palacio de Justicia en Santa Anna, la reforma y ampliación del instituto Ausiàs March, el colegio Les Foies, el depósito de tormentas del Clot de la Mota, la rehabilitación del puente de la avenida d’Alacant, la recuperación de la Torre dels Pares, la subestación eléctrica del polígono Sanxo Llop, el camping de Marxuquera, etc.

Desde la seguridad en el buen hacer que nos caracteriza –y que la ciudadanía valoró en su momento–, el optimismo como principio vital y la experiencia de superar crisis anteriores, seguiremos estando del lado de todas aquellas personas que más nos necesitan, transmitiendo un mensaje de convicción, determinación y confianza.

El principal problema y riesgo al que nos enfrentamos como ciudad, es volver a tiempos pasados donde la crispación o los posicionamientos más extremos por parte de otras fuerzas políticas nos pusieron en el mapa de aquello a lo que jamás deberíamos aspirar a convertirnos. Para evitarlo, la fórmula ya existe.

Pero se hace necesario poner en valor el liderazgo, la capacidad, el esfuerzo, el coraje y la valentía de la alcaldesa Diana Morant, y del equipo de gobierno.

Pueden contar con nuestra perseverancia e insistencia por tratar de hacer lo mejor para la ciudad y el conjunto de la sociedad que, sumado al de las vecinas y vecinos que la integran, podemos afirmar con la cara bien alta que Gandia es una ciudad que funciona.

Adrián Vila Flores

Vicesecretario de Organización PSPV-PSOE Gandia