Una de las medidas que impulsó el gobierno local de Gandia al inicio de la ‘desescalada’ fue la posibilidad de que comercios y hosteleros pudieran ampliar sus espacios en la vía pública, con el fin de compensar parte de las pérdidas sufridas durante el confinamiento, la limitación de los aforos y garantizar la distancia interpersonal durante las primeras semanas de la reapertura. Para ello, el Ayuntamiento anunció una modificación de la normativa que ha acabado en una nueva ordenanza reguladora de la ocupación del dominio público municipal y del uso de los inmuebles de titularidad municipal.
La nueva ordenanza recibió la unanimidad del Consell econòmic i social, de los agentes económicos y sociales de la ciudad y también de los partidos políticos. Así, después de toda la tramitación, la aprobación inicial y la exposición pública, el 27 de agosto entró definitivamente en vigor. Para el concejal delegado de Gobierno Abierto y Coordinación Administrativa, José Manuel Prieto, “supone una doble garantía: para los comercios y nuestros negocios, la posibilidad de ocupar con plenas garantías y seguridad jurídica el espacio público y hacer de esto un elemento de dinamización de la ciudad, que tanto lo necesita en estos momentos. Gandia compatibiliza usos, hace cumplir las normas de seguridad impuestas en la nueva normalidad, pero lo aprovecha como una potencialidad”.
Por su parte, el edil delegado de Políticas Económicas y Comercio, Ferran Martínez, ha explicado que la nueva ordenanza introduce elementos muy importantes: “El primero de ellos, apoyar a la hostelería en un momento muy crítico como la crisis sanitaria actual, con la posibilidad de flexibilizar la ampliación terrazas, la ocupación de la calzada. Pero sobre todo, racionalizar y dotar de coherencia las normas existentes hasta ahora, como por ejemplo, adecuar los horarios a la temporada de verano”.
Además, se han ampliado los horarios de montaje de las terrazas, que eran muy restrictivos, y ahora pueden hacerse a partir de las 9 h de la mañana; se ha permitido de una forma muy discreta la publicidad, que antes no era posible; los colores obligatorios que marcaba la anterior ordenanza y que era muy restrictiva se han simplificado…, etcétera. En definitiva, recordaba el edil, se trata de racionalizar las normas para facilitar la actividad comercial de la hostelería de Gandia.