Los concejales de Gestión Responsable del Territorio y Servicios Básicos a la Ciudadanía, Xavier Ródenas i Miguel Ángel Picornell, respectivamente, han presentado hoy otra iniciativa dentro de las acciones que se realizan a lo largo del año para sensibilizar la ciudadanía sobre las pautas de comportamiento responsables y cívicas hacia el mobiliario urbano y el cuidado de los parques y jardines. No en vano, la reparación de los desperfectos supone aproximadamente el 40% del presupuesto de la contrata de Parques y Jardines (2’2 millones) y una cantidad también millonaria en cuanto a los recursos de Servicios Básicos: reposición de papeleras rotas, bancos, fuentes, luminarias, contenedores, etc… Un recursos económicos que son de la ciudadanía y que se podrían dedicar a la mejora y el mantenimiento de espacios. “Cada lunes nos supone un esfuerzo económico y humano extraordinario devolver a su lugar la ciudad, a causa, por ejemplo, de los desperfectos ocasionados durante el fin de semana. Es un tema recurrente en las juntas de distrito, en las quejas de la ciudadanía, que estamos abordando a lo largo de la legislatura con acciones comunicativas para transmitir valores de respeto y civismo hacia el patrimonio de todas y todos”, ha recordado Ródenas.
Así, siguiendo esta línea, las acciones de sensibilización se dirigen en esta ocasión a la población infantil. Una primera parte con cartelería en diferentes puntos de la ciudad, que transmite mediante dibujos infantiles pautas de comportamiento. También se han editado los cuadernos “Aprende pintando pautas de comportamiento” para el alumnado de primero y segundo de primaria de todos los centros educativos de la ciudad.
“Es una iniciativa muy acertada, con criptogramas muy conseguidos. Una manera de despertar conciencias, educando. Y de explicar, por ejemplo, que agrediendo el mobiliario urbano se está haciendo daño también a los bolsillos de la ciudadanía. Una papelera puede valer entre 300 y 400 €. Un banco 500/600 €. Un contenedor 750 €… Son ejemplos para que nos hagamos una idea de lo que cuesta anualmente la reposición de estos elementos”, ha explicado Picornell.