Ana Morell llega ensalzando cada rincón de Oliva. Con ilusión en su mirada, habla de su playa, del tiempo y de sus recuerdos en cada lugar de la ciudad. Durante estos últimos cuatro años ha trabajado por esa ciudad que tanto quiere en una colación difícil, aunque con un balance final positivo.

A pesar de ello, cuenta a Gente de la Safor que confía en llegar a la alcaldía en estas próximas elecciones sin «cerrarle la puerta a nadie».

• ¿Qué supone que su partido vuelva a confiar en usted para ser candidata a la alcaldía?

Creo que no hay mejor placer y orgullo que tu agrupación confíe en la persona y en el equipo. El partido socialista de Oliva somos una familia y creo que es el mejor de los placeres y las satisfacciones presentarte en un partido cohesionado y unido.

• ¿Qué balance haría de estos cuatro años en el gobierno?

Haría un balance muy positivo del gobierno y de la coalición. Entrábamos a gobernar en un pacto complicado, pero supimos encontrar los puntos de encuentro entre los dos partidos. Pasamos por una pandemia sanitaria que hizo que priorizáramos los intereses de la ciudad de Oliva y eso sí que nos unió mucho.

Hemos tenido mucha sintonía en las cosas importantes, evidentemente, somos dos partidos y tenemos nuestras diferencias. Pero sí que creo que hemos progresado mucho en Oliva, hemos sabido liderar cambios en nuestra cuidad.

Sobre todo marco que el grupo socialista ha cumplido los objetivos, ha sabido diferenciarse y marcar la línea de educación, turismo, espacios públicos… Sí que ha sido un gobierno tranquilo, cohesionado y donde el grupo socialista ha podido trabajar tranquilamente en los objetivos dentro de sus áreas.

• ¿Y qué tal ha ido gobernar con Compromís?

Hemos pasado dos fases. Hemos tenido dos alcaldías, la primera con David González y la segunda con Yolanda Balaguer. En ocasiones hay discrepancias, el PSOE valora mucho el trato de respeto entre regidores y reivindica mucho sus espacios. En esta segunda etapa ha habido un cambio de comportamiento con los regidores de Compromís hacia los del PSOE, que creo que en ocasiones ha sido más complicado que durante la primera etapa.

El PSOE ha liderado el gobierno de Oliva y tengo claro que las obras en Oliva las ha liderado el partido socialista, hemos destacado en turismo, la pandemia se ha liderado por los socialistas con la concejalía de sanidad, en educación las mayores inversiones se ha producido llevándolo a cabo el partido socialista. En temas de parques, igualdad, violencia de género… Creo que dentro de este gobierno los regidores del partido socialista han trabajado mucho y han liderado el gobierno.

También es cierto que en esta segunda fase el PSOE ha tenido un liderazgo con más experiencia que los regidores de Compromís, que prácticamente todos son nuevos y en la alcaldía se ha notado la inexperiencia. 

• Los presupuestos han sido la asignatura pendiente a lo largo de los cuatro años.

Así es, cuesta mucho y se lo hemos reclamado a Compromís. El presupuesto consta de dos partes, la parte económica y la de plantilla y personal. En los cuatro años cuando personal lo lleva Compromís y la parte de Hacienda el PSOE, la plantilla no se aprueba. A día de hoy no hay plantilla aprobada, y es el 60 % del presupuesto municipal.

Todos los años se ha negociado la plantilla y se ha trasladado a Hacienda a finales de octubre. Si se presenta la plantilla en octubre del mismo año en el que se está acabando el ejercicio no se puede sacar un presupuesto municipal. En el 2021 fue el primer año en la historia en el que Oliva no tuvo presupuesto municipal. Yo era regidora de Hacienda y me trasladaron la plantilla de personal el 29 de octubre, y son dos meses de tramitación. Así no se puede aprobar un presupuesto.

Y es un reclamo que llevamos pidiéndole a la alcaldesa desde octubre del año pasado. No tenemos presupuesto municipal y sin él no hay subvenciones. Este año la nueva corporación será la que apruebe el nuevo presupuesto y eso no es lógico. Llegan tarde, pero nosotros por responsabilidad y para que las subvenciones salgan tenemos el presupuesto terminado. Compromís no negocia en tiempo y en forma pero, a pesar de ello, hemos buscado alternativas para que esto no tenga un impacto en la ciudad, pero no puede funcionar una ciudad así. 

• ¿Se han perdido inversiones por esta falta de presupuestos?  

No, porque el presupuesto de Oliva cubre los servicios básicos. Las inversiones y obras se realizan con subvenciones que pedimos a otras administraciones o a través del superávit del Ayuntamiento de Oliva.

El mayor efecto negativo que ha tenido esta falta de presupuestos ha sido la tardanza en cobrar las subvenciones las asociaciones, ese es el máximo efecto que puede tener esta falta.

• Una de cal y otra de arena. Oliva ha crecido en el sector turístico.

Creo que Oliva ha despuntado a nivel turístico. Me gusta mucho resaltar unas palabras del Secretario Autonómico de Turismo, Francesc Colomer, que en sus visitas decía que “Oliva está de moda”. 

Nosotros iniciamos la legislatura con la declaración de la Semana Santa como Fiesta de Interés Provincial y ahí ya marcas el interés de Oliva por despuntar. A esto se une los proyectos que hemos presentado en las ferias de turismo, como el Duna Market. 

Hace un mes hemos conseguido la declaración de Oliva como municipio turístico y eso es un distintivo de calidad. Tenemos un 80 % de las playas naturales. Hemos consolidado también los eventos deportivos con el Gran Fondo Alberto Contador o la séptima etapa de La Vuelta Ciclista España.

Hemos duplicado la cantidad de turistas que vienen a visitarnos y por eso las empresas vienen a instalarse aquí, se han registrado nuevos apartamentos turísticos.

Este es el modelo de Oliva, un modelo tranquilo, de disfrutar. La gente que viene aquí busca desconectar, tranquilidad y Oliva ofrece esa reconexión con el espíritu de cuando uno es pequeño. Creo que Oliva lo tiene todo.

• Pero todavía quedan cosas por mejorar en este ámbito…

Nos falta potenciar un poco los espacios públicos, sobre todo la playa de Oliva. Mejorar la playa creando bolsas de aparcamiento y creando nuevas aceras. La playa de Oliva se construyó sin ninguna ordenación urbanística, y hay aceras muy pequeñas y poco accesibles.

No tenemos paseo, pero ahora con el proyecto de la Unión Europea de las pasarelas de madera queremos crear un cordón donde la gente pueda caminar tranquilamente, además de peatonalizar algunas calles de la playa, porque se ha demostrado que cuando hemos peatonalizado algunas zonas ha comenzado a surgir nuevos negocios y vida. 

Creo que a la playa de Oliva le falta inversión en la mejora de los espacios. Es una de las reivindicaciones que hace la asociación de la playa. En la próxima legislatura es esencial empezar a buscar esas bolsas de aparcamiento y comenzar con la peatonalización, que yo iniciaría en Virgen del Mar.

• ¿Qué proyectos destacaría de esta legislatura?

Yo diría que todo. Cada obra que hacemos es importante, no renuncio a ningún proyecto que hemos hecho, pero todavía quiero más. Oliva ha estado sin inversiones desde hace muchos años y ahora tenemos la suerte y la oportunidad de que Oliva decida y diseñe la ciudad que quiere ser.

Desde el PSOE queremos esa humanización de la ciudad, vamos a continuar, pero queremos más para nuestra ciudad.

• ¿Cree que hay posibilidad de llegar a la alcaldía?

Sí, que creo que mi equipo puede llegar a la alcaldía de Oliva. Hemos ganado confianza y detecto que hay mucha gente que se ha sumado estos últimos años. 

Mi carta de presentación en estas elecciones es el trabajo que ha hecho el equipo socialista. En las anteriores venía de estar en la oposición y la carta de presentación no era el trabajo que había hecho, sino la confianza de quien te conoce o de las siglas del partido.

Ahora creo que el equipo humano hace mucho, el que llevaba, el que ha demostrado y el que ahora llevo. Nosotros somos un partido de gobierno, nos gusta gobernar, proponer y ejecutar y el PSOE es un partido de gobierno. 

• ¿Con mayoría?

Eso es lo que nos gustaría a todos. Si me preguntan, claro que sí, porque eso te permite ser el responsable del 100 % de las acciones, y eso es importante, tanto para bien como para mal.

Cuando viene un ciudadano y te pregunta por la licencia de un vado, que está tardando cuatro años, no puedo hacer nada. Yo no gestiono el área, yo acompaño a ese ciudadano, miro el expediente, pero no puedo dar un golpe sobre la mesa a urbanismo para decirles cómo se tiene que trabajar. Eso lo puedo hacer si tengo la alcaldía. Y eso es importante, tener la alcaldía para tener la autoridad con el fin de marcar las prioridades del ayuntamiento.

• ¿Repetirían con Compromís?

No cierro las puertas a nadie, porque no va a darse el caso de tener una mayoría y hay que saber con quién tienes más afinidad, con quién compartes la mayoría de los proyectos y ver las personas que forman parte. Se están sumando nuevos partidos políticos, y se trata de ver con quién compartes más alianzas y anteponer el bien de Oliva por delante de los intereses de partido.

Es cierto que como naturaleza ideológica, con Compromís compartimos una ideología, pero no todo es eso. Hay que ver la afinidad, los proyectos y la capacidad que tienen de trabajo. 

El PSOE no cierra las puertas a nadie, aquí anteponemos Oliva a las ideologías porque así será mejor para todos. Somos un equipo que podemos forjar alianzas con todos, somos un partido tranquilo en ese aspecto y no entramos en líneas rojas.

• Oliva cuenta con muchos partidos de centro-derecha. ¿Beneficiará esto a los partidos de izquierdas?

La división de la derecha es obvia. En Oliva estará Partido Popular, Projecte, UCIN, Vox… Hay un fraccionamiento evidente que creo que sí que beneficiará a la izquierda.

Espero que todos tengan la cordura, el buen hacer, el diálogo y el respeto que nos ha fallado mucho esto cuatro años en la oposición. La gresca y la crispación no beneficia a la ciudad. 

• ¿Seguirá esa crispación en campaña?

Creo que por parte de algunos partidos sí, porque lo llevan las personas que los lideran. Yo lo he empezado a notar en las redes sociales, con muchos perfiles falsos que detecto la consigna de algún partido político e intentan crear crispación en mis redes sociales personales. 

Siempre nace de un mismo entorno, pero ya no me sorprende. Nosotros estaremos siempre con la cabeza en el trabajo, somos parte del gobierno, tenemos la responsabilidad de trabajar hasta el último día y nuestra campaña va a ser demostrar el trabajo que hacemos y lo que queremos para Oliva.

• ¿Qué pondría en marcha los primeros meses de legislatura si llegara a la alcaldía? 

El primer día yo pondría en marcha urbanismo, no puede funcionar como funciona. Está bloqueado y lo primero que haría sería poner orden allí dentro y eliminar las arbitrariedades técnicas.

Sea en gobierno de coalición o unitario, urbanismo es innegociable. En este departamento se han aplicado criterios que hemos recurrido a la Generalitat y han tumbado el criterio municipal. El ayuntamiento deniega una licencia y la Generalitat la otorga porque la ley lo permite. No se pueden aplicar criterios que la ley no está diciendo, y eso es lo que pasa en urbanismo y es lo primero que hay que hacer. 

La percepción de la ciudadania es que el Ayuntamiento de Oliva bloquea las cosas y las hace difíciles. La ley y la burocracia es complicada, pero si la persona que te atiende no te facilita las cosas, genera malestar. Hay que facilitar las cosas y esa es mi prioridad. 

• ¿Cómo se imagina Oliva tras cuatro años gobernando la ciudad desde la alcaldía?

Me imagino Oliva transformada. Una ciudad de oportunidades, es la mejor ciudad porque tiene un potencial de crecimiento exponencial. Actualmente estamos negociando con la Generalitat un Plan de Inversiones para la Sosteniblidad y el Empleo de una empresa, Nudisco, que ha comprado unas instalaciones y va a montar un negocio de 80.000 metros cuadrados y 400 puestos de trabajo. Ale-Hop ya está construyendo y hay muchas empresas que están llegando a la ciudad. El ayuntamiento tiene que facilitar las cosas para que las empresas ganen confianza y sigan instalándose aquí.

Quiero una ciudad amable y humana que haga fácil el día a día de la ciudadanía. Me veo una ciudad perfecta para vivir y trabajar.