Pascal Renolt, ex concejal de Ciudadanos y ahora no adscrito, envió un comunicado a los medios en el que exigía al Gobierno de Gandia que hiciera cumplir «las sentencias de la Grúa Municipal», servicio que gestiona la misma empresa que gestiona el SER (zona azul).
Las sentencias citadas se refieren al conflicto que los trabajadores de la grúa mantienen con la empresa. Conflicto del que el Ayuntamiento de Gandia no es parte según el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
Gol y piscinazo en una misma jugada. «Al regidor no adscrito le han clavado un gol por toda la escuadra, se ha creído lo que le han dicho y se ha lanzado a una piscina sin agua», ha respondido el concejal responsable de Contratación, Miguel Ángel Picornell.
«La Grúa Municipal en Gandia es una bomba de relojería política pues todos saben lo que está pasando pero nadie se atreve a decirlo», dijo Pascal. Y es cierto que los trabajadores han ganado la batalla legal a la empresa, que es la que les debe pagar lo mismo que antes de la externalización del servicio.
Renolt ha enumerado algunas de las denuncias de los trabajadores, que éstos también trasladaron al Consistorio: «Denuncias que refieren a turnos de trabajo de 16 horas en pleno verano; retirada de coches de forma ininterrumpida de 8 a 16 horas a pleno sol en el mercadillo de la playa; una sola grúa en verano para Gandia y Playa». Como no podría ser de otra forma, a los responsables sindicales de los trabajadores se les pidió pruebas de unas irregularidades que conllevarían la resolución del contrato… pero éstas, hasta la fecha, no han llegado: «A 24 de agosto, ni por registro de entrada, ni por mail, ni por otros medios, se ha recibido en el departamento de Contratación ninguna comunicación por parte de los trabajadores del servicio. Sin embargo, los trabajadores de la Grúa tienen las puertas del ayuntamiento abiertas para aportar las pruebas que refuerzan su argumento».
Parece que la serie ‘La grúa en Gandia’ tendrá más que un par de capítulos de verano.