En un momento en el cual el mundo de la información está tan complicado, desapareciendo las ediciones en papel y la redes y los fakes a la orden del día, mantenerse 35 años es todo un logro. Gente de la Safor siempre ha sido un medio objetivo, aunque por algunos entornos se le haya criticado de sectario, eso es que estaba haciéndonos bien su trabajo.

Este medio nos ha enseñado en sus páginas a lo largo de los  años  las vicisitudes de las fallas, los duelos políticos y el día a día de las noticias de nuestra ciudad. Por mi parte solo tengo cosas buenas que decir.

En la parte laboral, la empresa familiar de la que formo parte acudimos a sus servicios para promocionarnos en varias ocasiones. Y en la etapa en la cual estoy inmerso ahora siempre han estado ahí para, solidariamente, prestarse a cualquier actividad que necesitara tener un altavoz mediático.

Tengo que decir, que a la vez que mi amigo Jesús, conocimos más intensamente a Gente de la Safor en una etapa que vivió nuestra ciudad, que al más puro estilo de la mafia siciliana, este medio sufrió un acoso que casi lo aboca al cierre. Fue en ese momento cuando un grupo de personas empezaron a movilizar a ciudadanos de distintos ámbitos de la ciudad: políticos, empresarial, cultural, educativo, etc… y decidimos implicarnos para que ‘Gente’ pudiera salir adelante. Y ahí estaban Marta, Pepe y Gonzalo,  viéndose en una tesitura que no se la deseo a nadie. El apoyo que recibieron fue enorme y todos los que apoyamos esa “salvación“ estamos bien orgullosos de haber participado y conseguir el propósito.

Sólo espero que sigan en la línea que llevan a cabo ahora, repartiendo información y dando voz a todo el mundo……sí, a todo el mundo.

Me despido agradeciendo su amistad.

Como le dije una vez, “Ojalá os vaya bonito”