¿Pueden los instrumentos de viento propagar el coronavirus? Es la pregunta del millón. El distanciamiento y las medidas de seguridad es el horizonte inmediato de las bandas de música. Nuevas normativas. Desinfectar los locales para los ensayos, analizar todos los elementos para garantizar la seguridad y mascarillas especiales para músicos e instrumentos.
¿Es momento de permitir las bandas de música en las calles? ¿Los instrumentos de viento pueden esparcir el virus? Son dudas que asaltan a partes iguales a músicos y espectadores. Se está estudiando detalle a detalle y todo apunta a que, a pesar de la presión, el aire que sale por el instrumento no tiene tanta fuerza y va al suelo.
La Confederación Española de Sociedades Musicales (CoESsM) ha realizado diversas consultas al Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en relación con las actividades que desarrolla el colectivo al que representa, formado por 1.100 sociedades musicales, con 80.000 músicos, 120.000 alumnos de escuelas de música y 1.000.000 de socios, agrupadas en las diversas federaciones territoriales existentes en el Estado español.
El gandiense Vicent Mengual es un reconocido Director y Compositor, que actualmente dirige la Societat Musical Benirredrà y comenta las últimas novedades al respecto.
– Las Bandas de Música de la comarca tenían un papel clave en las fiestas populares, pero se han suspendido por el Covid. ¿Cömo está siendo la vuelta a la actividad?
– Serán actuaciones muy puntuales y con características muy definidas por la situación de crisis sanitaria que hemos vivido y que estamos, esperemos, aún con los últimos coletazos.
– ¿Qué novedades hay para que los músicos puedan salir con total seguridad a las calles?
– A día de hoy, lo principal es lo básico, la distancia de seguridad. Hace un par de semana surgió una propuesta de una empresa valenciana, que se dedica a la distribución de productos químicos pero ha tenido que reinventarse, y ha creado un nuevo sistema de seguridad sanitaria en torno al mundo de la música. Esta empresa desde el inicio de la pandemia ha trabajado para desarrollar soluciones que permitan la vuelta de las bandas de música a las calles y a las fiestas de los pueblos, minimizando el riesgo de contagio.
– ¿De qué se trata?
– Ha patentado una serie de productos como las mascarillas para músicos que tiene una abertura en la zona de la boca y que por los propios pliegues de la mascarilla se cierra en el momento que no se está tocando. Han sido probadas en laboratorio y cumplen con todos los requisitos, al igual que las que llevan los instrumentos, que permiten salir el sonido, pero no las gotas de saliva, que podría ser peligroso para los otros músicos y para el público.
– ¿Cómo se adapta a cada instrumento?
– Cada músico, de acuerdo al instrumento que toca, tiene una mascarilla diferente, pero a la vez cada instrumento tiene una ‘especie’ de mascarilla que cubre la salida final del aire expirado por el músico, una especie de tela. Si que es verdad que por los diferentes orificios de los instrumentos que tienen llaves como un clarinete o un fagot, incluso una flauta, sí que se inspira cantidad de aire. Pero se han hecho muchos estudios que demuestran que la emisión de partículas en suspensión que puedan tener carga vírica es mínima. A efectos visuales puede parecer aparatosa o que mitigue la calidad del sonido. Es verdad que se mitiga un poco, pero es imperceptible para el oído humano.
– ¿Cómo se mide la trasmisión vírica?
– Los cantantes tienen la máxima con 80cm, a partir de aquí el segundo instrumento es la flauta son 20cm de trasmisión y desde este instrumento los demás van disminuyendo. Por lo tanto, si mantenemos la distancia de seguridad de 1,5 a 2 metros que marca la legislación, y a esto le sumamos las mascarillas, tenemos un protocolo de actuación que nos da mucha seguridad, tanto a los músicos como a la población que nos escucha. La seguridad es importante tanto a nivel físico como a nivel psicológico, estas medidas y utensillos nos permiten salir con mucha tranquilidad para poder realizar actos musicales.
– ¿Y en el caso de los directores?
– Usamos las típicas pantallas que conocemos últimamente. Estas pantallas nos permiten que los músicos puedan ver nuestras facciones, aquello que necesitamos trasmitirles de forma no verbal con mucha seguridad de carga vírica. Con todo ello, creo que recuperamos la confianza y la seguridad para recuperar la calle con fiesta y con música.
– Un verano sin música es prácticamente impensable en la Safor…
– Un verano sin música va a ser muy duro para todos.