El gobierno municipal de Gandia y el sector hostelero han acordado, después de mantener varios encuentros, una serie de Instrucciones a la hora de desplegar las terrazas (75% de aforo, distancia de 1,5 metros entre mesas y las ya habituales impuestas por las autoridades sanitarias en cuanto a higiene y uso de la mascarilla) y realizar una nueva revisión de los espacios que ocupan las terrazas de estos establecimientos donde, siempre que sea posible y no interfiera el paso de peatones y vehículos, se aumente el número de mesas.
Las terrazas se han convertido «en un elemento estratégico para la hostelería y la ciudad. Todos estamos de acuerdo que, para evitar la pandemia, es imprescinidble ser rigurosos con las instrucciones de la autoridad sanitaria y utilizar los espacios al aire libre. Hemos mantenido reuniones para que los espacios sean más eficientes y efectivos. Por eso hemos simplificado los trámites, facilitado la instalación de materiales auxiliares para la hostelería además de otras medidas que estamos estudiando conjuntamente», explica el concejal delegado de Políticas Económicas y Comercio, Ferran Martínez.
El edil ha hecho un llamamiento a la ciudadanía en general: «Todos tenemos que ser absolutamente respetuosos con las normas y no trasladar algunos malos comportamientos a los espacios de los establecimientos privados».
Por su parte, Nacho Arnau, concejal delegado de Seguridad, incide en que la hostelería «toma un protagonismo importante en esta desescalada y por ello hemos mantenido reuniones con el sector donde hemos acordado dar una interpretación más amplia a la Norma. Siempre que sea posible vamos a favorecer que la hostelería pueda ocupar la vía pública» y recalca que «en este tipo de situaciones cobra especial importancia la implantación de las dos ‘Moradas’, que supondrán un balón de oxígeno para muchos establecimientos».
Arnau finalizó su intervención afirmando que «ahora es el tiempo de medidas excepcionales que seguiremos perfilando de la mano del sector. La hostelería tiene que estar tranquila porque, desde el diálogo, seguiremos trabajando a mejorar las condiciones de uno de los sectores más afectados por la pandemia».
José Manuel Navarro, presidente de DestíSafor, ha recordado que desde el primer confinamiento «ya estuvimos planteando al consistorio medidas que se han ido poniendo en marcha. Hemos conseguido muchas cosas que nos han permitido tener una campaña estival aceptable. Ahora mismo solo podemos trabajar en la calle, pero entre todos conseguiremos que se armonice la convivencia entre los negocios y los vecinos».
Finalmente, Ferran Fuster, en representación de la asociación de Hostelería de Centro Histórico, se muestra ilusionado por la reapertura: «Estamos muy ilusionados y con ganas de ver cómo funciona esta nueva etapa. La hostelería genera mucha economía y contribuye al bienestar social de la ciudad. Seguiremos trabajando codo a codo con la administración local para llegar cuanto antes mejor a la nueva normalidad».
Hoy en su primer día de funcionamiento después del último confinamiento, las terrazas se han visto casi vacias. Diferentes hosteleros comentaban que «se ha trabajado muy poco esta mañana» o «no era lo que esperábamos, la gente está asustada». El día tampoco ayudaba, nublado y con aire frio no era apetecible sentarse en las terrazas. «Esperemos que poco a poco volvamos a la normalidad, esta situación no hay quien la aguante» comentaba un conocido restaurador del centro histórico.