La actividad solidaria durante y también después de la pandemia del coronavirus no sabe de descanso en la Safor. Han sido decenas de muestras altruistas las que hemos ido conociendo con el paso de los días. Otro ejemplo más que se suma a la lista de LOS OTROS HÉROES es la ONG Alma de Acero, dedicada desde su creación a la ayuda al necesitado. Sin más requisitos que ese. Y la pandemia, con todas las repercusiones sociales y económicas que provocó y sigue provocando, no podía quedarse al margen de la acción desinteresada de esta asociación.
Durante todo este tiempo han sabido adaptar rápidamente a las circunstancias y estar allá donde la necesidad lo requería. Han confeccionado y repartido mascarillas, dotaron a los sanitarios de pequeños electrodomésticos para que sus duras y largas jornadas de trabajo fueran algo más llevaderas y continúan haciendo acopio de materia de higiene y alimentación para bebés.
“Una organización solidaria como la nuestra tenía que estar a la altura de las circunstancias y en un pandemia como la que hemos vivido, nos hemos diversificado y respondido a las demandas que nos han llegado”, explica Joan Grimal, responsable de comunicación de Alma de Acero. Pañales, toallitas, cremas, potitos o leche en polvo. Se han estado preparando y repartiendo packs casi desde el inicio del confinamiento, cuando muchas familias empezaron a tener dificultades para adquirir estos productos de primera necesidad y de uso diario. “Era una ayuda urgente, que necesita una respuesta inmediata, y a veces es más rápido recurrir a la ayuda social que pasar toda la burocracia”, afirma.
Aunque la pandemia se encuentra estabilizada de momento y la actividad económica va remontando poco a poco, todavía hay muchas familias que no se han recuperado al mismo ritmo. Muchos han perdido el empleo o se encuentran en ERTEs y por ello, las ayudas siguen siendo necesarias. Farmacias, supermercados, tiendas de barrio, Ayuntamientos… “La verdad es que la gente se ha volcado. Como siempre ocurre cuando lanzamos una campaña y pedimos colaboración. Personas anónimas, empresas de toda la Safor, incluso trabajores y trabajadoras de empresas que aportan también una parte.
Mientras tanto, Alma de Acero continúa con su actividad y esta misma noche presentan ‘La vela solidaria’ en los jardines de Fomento AIC en colaboración con Antic Aroma. Estos actos resultan más necesarios que nunca ya que sus dos grandes fuentes de recaudación han desaparecido del calendario de este año. Por un lado, la tradicional matinal motera, alma mater del colectivo; y por otro, la gran fiesta solidaria que tiene lugar por el mes de octubre. Ante la dificultad de organizar sendos actos, por las evidentes aglomeraciones de gente que genera, se han visto obligados a buscar otros medios de financiación para poder seguir ejecutando sus proyectos.
Entre ellos, uno que lleva meses gestándose para el hospital Francesc de Borja de Gandia y que también la pandemia ha paralizado en seco. Por ello, las pequeñas iniciativas son tan importantes, como el acto de esta noche o el concurso de dibujo infantil convocado durante el confinamiento que acabó con la venta de más de 100 camisetas. También de la matinal motera, aunque no vaya a celebrarse, se pondrán a la venta camisetas. “Cuando el mundo da un giro y nos pega a todos, Alma de Acero tiene que estar ahí”, añade Grimal.
Todas las personas que deseen colaborar con la asociación pueden llamar al teléfono 689921112.
Aquellas que tengan alguna necesidad pueden enviar un correo electrónico a almadeacero@hotmail.es y se pondrán en contacto con ellas.