El fuerte dispositivo policial, coordinado entre los diferentes cuerpos de vigilancia, ha conseguido mantener blindada la ciudad de Gandia durante todo el fin de semana, tal y como marcaba el cierre perimetral decretado por la Generalitat Valenciana para las ciudades de más de 50.000 habitantes. El dispositivo, activo desde las 15 horas del viernes hasta las 6.00 del lunes, ha contado con la participación de agentes de la Policía Local, Nacional, Guardia Civil, que han estado repartidos tanto en controles fijos como móviles.
Se contó también con miembros de Protección Civil, para asegurar la aplicación de la normativa en la playa, mercados y parques en cuanto a distanciación social y uso de mascarilla.
En total, la Policía Local controló un total de 7.291 vehículos de los cuales fueron sancionados 137 para incumplir el perimetraje de Gandia. Nacho Arnau, conejal delegado de Seguridad y Movilidad, ha corroborado que las medidas aplicadas el fin de semana «han generado menos movimiento de vehículos y personas que han demostrado con su actitud que es cosa de todos protegernos de la pandemia». El concejal también ha explicado que ha mantenido, junto con responsables de las otras ciudades de más de 50.000 personas que habían estado perimetradas, una reunión con la Consejera de Justicia, Gabriela Bravo, donde se ha analizado el resultado del dispositivo.
El decreto que estipula el cierre perimetral se prolongará todavía los dos próximos fines de semana. El resto de restricciones siguen vigentes, al menos, hasta el 15 de febrero.