“Quan tocarà regar, tirarem llavor, tirarem llavor”, y así lo hizo La Maria, sembró la semilla con estudios y pasión por la música y hoy recoge los frutos de un trabajo de amor por el folklore.

«Roquerismo», folklore y elegancia, así define su música. La Maria se ha convertido en todo un fenómeno de la canción valenciana. Así lo declaran los últimos Premios Ovidi 2023, que la proclaman: mejor artista revelación, mejor canción y mejor producción. La olivense saltó a la fama al vivir el que, para ella, fue un antes y un después en su vida, la viralización de “Arranquen vinyes”. En la actualidad, siente que ha cumplido un sueño, al sacar el disco “L’Assumpció”, el cual, según cuenta ella misma, le está dando muchas alegrías. 

Gente de la Safor ha querido conversar con la joven artista de la Safor, para que cuente cómo ha sido cumplir el sueño de dedicarse a la música. 

Todo empieza cuando inicio mis estudios de música en el Conservatorio de Cataroja. Comencé a estudiar la especialidad de canto en valenciano y allí me dan una canción que se llama «Arranquen vinyes», que es una pieza del pueblo de Alcácer. Yo la empiezo a cantar y la publico en redes sociales, tanto en Instagram como en Twitter. El vídeo comienza a hacerse viral de una forma más rápida de lo normal. Y ahí empieza a hacerse realidad mi sueño.

Mi último disco, L’Assumpció, sale de todo el proceso de viralización. Es un disco corto, cada canción cuenta un capítulo de mi historia, del camino interior y emocional que hice hasta hoy. Lo considero como un libro de lo que me ha pasado.

• ¿Qué sientes cuando tu vídeo se hace viral?

La sensación era de estar muy feliz. Yo estudié magisterio y después hice un máster de educación especial. En este momento estaba haciendo las prácticas en el Centro Enric Valor de Gandia. El colegio era muy especial y yo pasé por un momento en el que estuve «tocada» emocionalmente. Cuando el vídeo se hizo viral, el alumnado me apoyó mucho y recibí mucho cariño. Yo llevaba tiempo buscando, de manera interior, que esto pasara. Y pasó.

• ¿Te gustaría compaginar tu trabajo como profesora con la música?

A mí me gustaría dedicarme a la música siempre. Si por alguna razón la vida no me lo permite, volvería a dedicarme a la escuela, pero mi principal objetivo es poder dedicarme al completo a la música.

• ¿Cómo te defines como artista?

Es muy complicado definirse, pero yo siempre intento acotarlo marcando que mi música es: folklorica, roquera y elegante. Es una combinación un poco rara, pero que me define. Es mi esencia.

• La música es algo muy emocional y a través de ella se transmiten muchos valores, ¿qué valores quieres transmitir con tu música?

Me gustaría transmitir la música valenciana desde un punto de vista de tratar el folklore con mucha dignidad y elegancia, no verla solo desde los tópicos valencianos. El almuerzo valenciano, la «paelleta» y la naranja está muy bien, pero los valencianos somos mucho más que eso. Deberíamos ver el folklore aquí, cómo se hace en otras partes, con mucha elegancia. Deberíamos a aprender a vivir la tradición cómo se merece, con orgullo.

• Llevas desde 2021 dedicándote públicamente a la música. Si tuvieras que quedarte con una experiencia vivida hasta día de hoy, ¿cuál sería?

Yo creo que me quedaría con el principio, con el momento de la viralización. Fue una etapa muy dura, pero también fue la que me cambió la vida. Estudié mi carrera dejando un poco de lado la música, porque para mí era algo inalcanzable. En el momento de la viralización fue cuando me di cuenta de que, quizá, sí me podía dedicar a mi sueño. Fue un cambio de paradigma, un antes y un después. Rompí con mi antigua vida para dedicarme a la música.

• Tenías el sueño de dedicarte a la música, ¿imaginabas llegar hasta donde estás ahora?

Yo creo que no. Mi sueño era dedicarme a esto, pero no sabía cómo llegar a ello. Quizá sí pensaba que pudiera registrar un disco, y que se quedara en mi pueblo, pero el hecho de ir más allá, no me lo imaginaba.

• En 2021 dijiste textualmente «Me gustaría dedicarme a la música, pero eso es un poco fantasía», ¿lo has hecho realidad?

Estoy alucinando, porque no lo recordaba y me hace mucha ilusión. Yo creo que sí que lo he conseguido. Ahora tenemos fechas programadas para conciertos durante todo este año 2024, eso me hace ver que sí, que he conseguido dedicarme a esto. De hecho, me he desactivado de la bolsa de profesorado y me estoy dedicando al completo a la música, y eso me hace muy feliz.

• ¿Dirías que tienes referentes en la música?

Sí, además, yo creo que todo el mundo debe tener referentes en su profesión. La inspiración no puede venir sola. Se necesitan estímulos para crearte como artista. No podemos vivir en una habitación encerrados y pretender crear cosas. Pienso que somos lo que vamos acumulando en la vida.

Si te hablo de artistas podría decirte que cantantes como: Maria Arnal o Julieta Venegas, entre otros artistas alejados de mi estilo, pero que son referente. Además, para mí es muy necesaria la gente que tengo a mi lado: familia, amigos y compañeros de vida.

• ¿En qué punto de tu carrera crees que estás en este momento?

Estoy en un muy buen momento. Lo pienso mucho y creo que estoy en un momento en el que hemos trabajado mucho preparando y presentando el disco en lugares en que jamás pensé que actuaría, y ahora queda recoger los frutos y seguir trabajando.

• ¿Nos podrías avanzar nuevos proyectos para el 2024?

El 2024 se presenta muy bien, el año 2023 fue un año de mucho trabajo y ahora creo que es momento de recoger los frutos. Vienen colaboraciones nuevas, participaciones en muchos actos, galas de premios y muchos conciertos. Estamos cerrando las fechas para la gira y en muy poco tiempo publicaremos las confirmaciones.

• Vienen galas de premios, pero no sería la primera vez que te alzarías con uno.

Exacto, el disco de L’Assumpció me está dando y me ha dado muchas alegrías. No es normal para mí que me cambie la vida y que, además, esté tan bien valorado. Los primeros premios que llegaron a mi vida fueron los Premios Ovidi, que se hicieron en Xàtiva en 2023. En esa ocasión el disco estuvo nominado en cuatro categorías. La categoría de mejor disco folk no la ganamos, lo hizo Pep Botifarra, pero para nosotros ya fue un premio el hecho de coincidir con él. Las otras tres categorías sí que las ganamos -Premio a mejor canción, mejor artista revelación y mejor producción-. Estoy muy agradecida a todos los jurados que me han valorado.

• Has sacado un documental en YouTube, ¿cómo fue esa experiencia?

El documental nos lo propuso Julio Cebolla, que se dedica al mundo audiovisual especializado en música. Él nos propuso esta idea tan bonita, coincidiendo con el concierto en directo en el Teatro Principal de Valencia. Fue precioso y me hizo mucha ilusión hacerlo.

• La música es una profesión en la que se pone el alma. Las piezas se crean desde las experiencias de los artistas. ¿Qué momentos te hacen feliz y te ayudan a crear música?

Lo que más feliz me hace y me recarga las pilas es el público, hacer conciertos. Cuando estoy encima del escenario, me llega la energía de la gente que viene a verme. Aun estando nerviosa y apoderándose de mí los pensamientos intrusivos, es el mejor momento, es mi regalo.

• Cuando pones toda tu energía en lo que haces siempre hay una pequeña parte de miedo. ¿A qué tienes miedo?

Sobre todo tengo miedo de que algún día se acabe este sueño, pero ya te digo que si algún día finaliza, no será ni por mí, ni por ideas, ni por música. Sin embargo, me da fuerza ver que la gente que ha estado ahí desde «Arranquen vinyes», continúa viniendo a los conciertos.

Mi proyecto es un proyecto que abraza a la gente nueva y a la que se quiera ir también. El público tiene que tener el derecho a irse y a volver cuando le apetezca. Fundamentalmente, el miedo es ese, parar en algún momento, junto con otros miedos más puntuales que se tienen día a día. Mis trabajos serán cambiantes, mí carrera será muy evolutiva. Soy una cantante que entiende un disco como un libro que cuenta historias.

Pido a la gente que escuche música de todo tipo, que se ponga a prueba. Hay que escuchar lo que gusta y lo que no tanto, para saber lo que realmente te llena. Hay que hacerle caso al amigo que te invita a un concierto, que a priori no te gusta. Hay que abrir la mente, para descubrir cosas buenas. No hay que tener miedo de salir de la zona de confort, porque puedes descubrir cosas mejores, porque siempre hay cosas mejores. Invito a la gente a que escuche mucha música y cuanto más alejadas de tus gustos, mejor, eso ayuda a definirte como persona.