La próxima semana darán comienzo en Oliva las obras de mejora en aquellos caminos rurales y agrícolas que presentan un alto riesgo de inundabilidad y las zonas con embalses de agua para dar una mayor seguridad viaria. Esta actuación tendrá lugar en el camino de las Marjaletes, el camino del Assagador de Carro, el camí Pont de Bolo, el camí de l’Aigua Blanca, el camí de la Celidònia i el camí del Riu Rau de Sancho.
El concejal de Obras y Servicios, Miquel Doménech, ha asegurado que «se ha invertido en estas actuaciones para mejorar los tramos que se veían afectados con los temporales y daban problemas para transitar. Desde el Ayuntamiento continuaremos apostando e invirtiendo para mejorar la seguridad viaria y el acceso a los caminos agrarios». Por otra parte, la alcaldesa, Yolanda Balaguer, ha destacado la necesaria mejora de estos caminos que son propensos a encharcarse en días de lluvias fuertes. «Estas mejoras tienen el objetivo de evitar futuras inundaciones y deterioro del asfalto, y también dar un acceso más seguro a las personas propietarias de los campos de la zona».