El sátrapa, imperialista, nacionalista y dictador de Rusia,Vladimir  Vladimírov Putin, decidió el 24-f invadir Ucrania, como imagino que ya saben. El “Gran Oso” ruso intenta conquistar un país independiente, libre y frontera con Europa por intereses personales de un genocida sin escrúpulos.

No voy a ser tan osado de pontificar sobre geopolítica internacional, a tanto no me atrevo, voy a verter mi opinión basada en sentimientos morales tras los hechos consumados. 

No soy un “tertuliano” que opina de todo sin admitir que no sabe más que de un par de cosas, eso los avezados. Los mismos que hace dos semanas aseguraban que Rusia no osaría atacar Ucrania porque lo único que pretendía era tensionar a los Estados Unidos y a la Unión Europea para satisfacción de su aliada, China.

Estos son los que ahora aseguran que caminamos hacia la Tercera Guerra Mundial. Con lo cual aumentan mi serenidad y tranquilidad, ya que sólo aciertan cuando rectifican.

Mención aparte merece el tránsfuga y enchufado, Toni Cantó, mal actor y peor presunto político. Tras la manifestación en favor de los ucranianos en Madrid vomitó el siguiente tuit “Por la paz, con los ucranianos y contra el comunismo”. Se puede ser más ignorante pero no más cortito.

Resulta que Vladimir Putin para Cantó es comunista en Rusia a día de hoy. Con lo cual pensará que Franco era demócrata y él habla chino mandarín. Si no sabe que Putin es un nacionalista de derechas, dictador, sátrapa y autárquico, que curse de nuevo la enseñanza secundaria y comience por culturalizarse, buen fichaje de Díaz Ayuso para Madrid. Afortunadamente ya no lo relacionan con la Comunitat Valenciana (qué descanso). 

Me produce una inmensa pena ver y escuchar en los medios de comunicación a los habitantes de Ucrania huyendo hacia Polonia para tratar de salvar la vida. Principalmente gente mayor, mujeres de todas las edades y niños con la angustia reflejada en sus caras. Los valientes y sacrificados hombres de entre 18 y 60 años han quedado en el país, tras la petición del Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski de movilización general para enfrentarse a los depredadores rusos e impedir la invasión. Loable reto pero se asemeja irrealizable por la potencia del enemigo.

Su capacidad de resistencia ha convertido el pretendido Blitzkrieg (Ataque Relámpago) que pretendía Putin (dos o tres días) en una ciénaga que atrapa y retiene a los militares rusos. Ojalá puedan aguantar, pero me temo que la masacre antes de la rendición va a ser terrible.

Estados Unidos y la Unión Europea tratan de tranquilizar sus conciencias mandando dinero, armas, y alimentos. Polonia está siendo refugio de ucranianos. Salvo las represalias económicas dirigidas a romper económicamente Rusia por dentro y provocar una insumisión de los oligarcas y magnates rusos cuando vean sus fortunas menguadas, al no ser Ucrania un país miembro de la OTAN, no pueden intervenir militarmente.

En torno a 5.000 personas han sido detenidas y encarceladas entre Moscú y San Petersburgo por  tener la valentía de salir a protestar a la calle ante la invasión y agresión a Ucrania. La respuesta de Putin ha sido inevitable en un país en el que manda un déspota de derechas, dictador y genocida. La libertad de opinión, manifestación y actuación están prohibidas.

Cuando el dictador ruso ataque Suecia y Finlandia ya podrá actuar la U.E. y la OTAN militarmente, mientras tanto Ucrania verá morir a civiles y militares, pero sola.

Si alguien de los pulcros dirigentes de Estados Unidos o la Unión Europea bajaran al metro de Kiev (capital de Ucrania) donde se refugian miles de ciudadanos que no han podido abandonar el país, para explicarles a los refugiados que sufren los bombardeos diarios, que no pueden hacer más, aunque el exterminio se vuelva insoportable, y no se le cae la cara de vergüernza, pues nada… a otra cosa.

Que aproveche y les explique a los padres ucranianos, cómo soportar  la angustia tras ver marchar a la guerra a sus hijos, que han cambiado los apuntes de la Universidad por un kalashnikov para desafiar a la muerte. 

Es insoportable ver el desconsuelo de los niños y niñas que deberían estar en el colegio jugando con sus compañeros ahora hacinados en los refugios o caminando por una carretera nevada, con un frío insoportable, tratando de llegar a la tierra prometida polaca huyendo de una guerra. Ver a una señora muy mayor caminando sola por una carretera, con una maleta y un paraguas, llorando bajo el agua-nieve y gritando a la cámara “¡Qué voy a hacer. Estoy sola! Eso desgarrador.

Me temo mucho que cuando esto termine como quiera que sea, el caos haya triunfado, la rebeldía haya dado paso al conformismo, los miles de muertos por ambas partes duerman eternamente en los corazones de sus familiares, la impotencia y la frustración dejen de doler y el resto del mundo que pudo hacer algo más por paliar tanto sin sentido causante de tanto dolor, miren hacia otro lado, los ucranianos afrontarán su triste realidad y tratarán de vivir como puedan.

Dijo Albert Einstein, el Físico y padre de la Teoría de la Relatividad que: “No se como será la Tercera Guerra Mundial, sólo sé que la cuarta será con piedras y palos”. En el siglo XXI seguimos como el primer año de nuestra existencia como seres humanos, la violencia ensucia nuestra existencia.