La pasada semana se reunía la Plataforma por la Huerta de la Safor que ha llegado a presentar casi 2.000 alegaciones al proyecto de ampliación de la CV-60.

Aroa Gregori, consultora medioambiental, y Marc Fuster, ganadero, han expuesto algunos de los motivos por los cuales se ha generado este movimiento de lucha por la huerta de la Safor que en un par de meses ha conseguido llamar la atención sobre un proyecto que representa la destrucción irreversible de más de 60 hectáreas de huerta en la comarca.

Paisaje, patrimonio, medio ambiente, agricultura, son algunos de los ejes que vertebran las alegaciones, que serán presentadas por ayuntamientos, asociaciones y partidos políticos.

Hay que recordar que algunos grupos políticos, empresarios y sindicatos muestran su total apoyo al proyecto de ampliación de la CV 60 y su conexión con la N332, que ha sido presentado por la Consellería de Obras Públicas.

La Plataforma ‘Per l’Horta de la Safor’ considera que los estudios de impacto ambiental que presentan están obsoletos, “cuando no caducados, no se tiene en consideración el estado de los cursos fluviales, ni la protección de los acuíferos, ni los impactos reales sobre la biodiversidades y los ecosistemas locales. Omite la capacidad de la huerta para absorber CO₂, así como el peligro de intrusión salina”.

Además, en un momento de emergencia climática, los expertos alertan de “la importancia de mantener las huertas históricas cerca de los núcleos habitados y de promover una agricultura sostenible, basada en la soberanía alimentaria. El que la misma Generalitat Valenciana ha hecho con la protección de l’Horta de València, se reclama para el resto de huertas históricas”.

La Plataforma por l’Horta de la Safor continuará trabajando activamente para informar a la ciudadanía y manifestar su rechazo a este proyecto “una infraestructura de estas características no se puede construir en medio de una conurbación, como si fuera un territorio despoblado y fragmentado, ignorando la red de relaciones de todo tipos que se dan entre los pueblos de la comarca, que configuran su idiosincrasia, y que han sido ignorados de forma vergonzosa. Un muro de casi 12 metros de altura en algunos puntos, que parte la comarca en dos, la aísla y la incomunica, representa un precio absolutamente inaceptable para una supuesta y no demostrada mejora económica”.

ACTUACIONES

En los últimos dos meses se han solidarizado con la Plataforma diferentes entidades: sindicatos (CGT e Intersindical), partidos políticos (Compromís, Podemos y Esquerra Unida), asociaciones y centenares de personas a título individual, artistas del País Valenciano, y ciudadanos anónimos.

Se han presentado y aprobado mociones contra la autovía en los Ayuntamientos de Almoines, Bellreguard, Oliva, Potries, Rafelcofer y Rótova.

Se han realizado movilizaciones, como por ejemplo una manifestación (27 de junio), una Bicicletada (desde los pueblos de la comarca en la Plaza del Ayuntamiento de Gandia, el 17 de julio) y una noche con David Segarra con la proyección de cuatro documentales por l’Horta (Bellreguard, 23 de julio). 

Desde la plataforma aclaran que “una vez presentadas las alegaciones se abre una nueva etapa de movilización para continuar oponiéndonos al que consideramos una destrucción irreversible del territorio. La Plataforma por la Huerta de la Safor llegará si hace falta, a los Tribunales en defensa de la tierra y de la vida en nuestros pueblos”.