El nuevo depósito de agua potable compartido entre los municipios de Guardamar de la Safor y Bellreguard ya está finalizado y se ha procedido a la conexión del depósito a la red de suministro. Este depósito, que garantizará un agua de gran calidad a los vecinos y vecinas de ambas poblaciones, no es más que el primer paso del proyecto estructural de suministro de futuro en Guardamar de la Safor.

El proyecto en breve se verá reforzado con la equipación necesaria para descalcificar el agua y durante el que resta de legislatura se procederá a desnitrificar el agua con lo que se garantiza el ciclo del agua potable de muchísima calidad.

Los trabajos arrancaron a principios de verano con el objetivo de corregir las deficiencias del servicio de abastecimiento de agua potable que llevaron a su municipalización en 2018 en el caso de Bellreguard. Desde entonces, ambos Ayuntamientos han trabajado conjuntamente para llevar adelante el proyecto que el pasado mes de febrero se manterializada en la firma del convenio. El nuevo depósito de la playa ha supuesto una inversión de 229.900 euros y dará servicio en la playa de Bellreguard, así como a todo el municipio vecino de Guardamar, mejorando notablemente la calidad del servicio de abastecimiento.

Paralelamente, el Ayuntamiento ha elaborado un plan para acelerar la renovación de la red de contadores, sustituyendo prácticamente uno de cada cuatro de los existentes. Y es que, según el análisis del parque de contadores elaborado el año pasado, sólo un 23,6% de ellos tenían una antigüedad inferior a 10 años, que es el periodo en el cual se estima que se tiene que proceder a su sustitución.